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En blogs anteriores hemos hablado de qué es el drenaje linfático manual y de los efectos beneficiosos que tiene en el tratamiento del linfedema post-mastectomía. En este blog queremos exponer otras indicaciones de drenaje linfático manual así como los diferentes tipos de edemas y linfedemas que se pueden presentar y su clasificación.
¿Cuáles son los tipos de edemas que existen?
Diferenciamos 2 tipos de edemas: edemas estáticos (o linfedemas) y edemas dinámicos. Veamos con más detalle en qué consiste cada uno de ellos:
Edemas estáticos o Linfedemas
Los edemas estáticos tienen lugar cuando existe un déficit del sistema linfático. Éstos a su vez pueden clasificarse en tres tipos distintos:
- Linfedemas primarios o linfedemas congénitos: aparecen desde el nacimiento, con motivo de una malformación a nivel del sistema linfático. Pueden presentarse de forma precoz desde el momento del nacimiento o bien a lo largo de la vida, a veces desencadenados por un simple traumatismo. Se pueden dar en cualquiera de las 4 extremidades e incluso zona genital. En bebés o niños con un linfedema congénito de aparición precoz, estaría indicado el drenaje linfático manual. Cuando aparece tardíamente en los adultos también estaría indicado.
- Linfedemas secundarios: aparecen tras cirugías de la mama o cirugías a nivel pélvico donde se ha extirpado parte del sistema linfático, normalmente ganglios a nivel axilar o inguinal. También pueden adquirirse tras las sesiones de radioterapia, tras quemaduras o bien por el bloqueo producido por una tumoración no maligna.
- Lipedema: este tipo de edema se produce cuando el sistema linfático es bloqueado por grasa. Sus signos clínicos son los mismos que en el caso de un linfedema.
Para el tratamiento de estos 3 tipos de linfedema es necesario aplicar un vendaje multicapa tras realizar la sesión de drenaje linfático manual. Tras el diagnóstico del linfedema, debe realizarse una fase denominada de “ataque”, consistente en sesiones de drenaje linfático manual y vendaje multicapa diarias, hasta que el perímetro del edema disminuya al máximo. Después se pasará a una “fase de mantenimiento” donde la frecuencia de las sesiones será mayor y ya no hará falta un vendaje multicapa, éste se sustituirá por un manguito o media de contención hecha a medida, que el paciente deberá renovar cada 6 meses.
Edemas dinámicos
En los edemas dinámicos el sistema linfático está intacto pero saturado por un aumento del líquido intersticial. Pueden ser:
- Edemas posttraumáticos y/o deportivos: esguinces, contusiones…
- Edemas postquirúrgicos: tras cirugías estéticas (liposucciones, implantes mamarios…), ortopédicas (prótesis de rodilla, fractura de tibia/peroné, fractura de hombro…), intervenciones maxilofaciales…
- Edema gestacional: Normalmente el edema gestacional se desarrolla a partir de la semana 20 y es más común a partir del segundo embarazo. Aquí interviene tanto un factor hormonal como un factor mecánico, por la compresión que ejerce el útero en crecimiento sobre las venas pélvicas. Estos factores pueden dar lugar a la formación de un edema en miembros inferiores así como un edema genital, pudiéndose desarrollar las denominadas varices vulvares y/o varicosidades en miembros inferiores. En estos casos el drenaje linfático manual proporciona un alivio de la sintomatología causada por el edema, favoreciendo además las condiciones del parto al encontrarse el suelo pélvico más descongestionado. Normalmente este tipo de edema se resuelve de forma espontánea tras el parto, cuando la compresión sobre los vasos pélvicos desaparece con el nacimiento del bebé.
- Edema postparto: en algunos casos el edema en los miembros inferiores puede permanecer en los días posteriores al parto. No obstante, lo más frecuente en el post-parto es una inflamación de las mamas provocada por la subida de la leche, a veces dolorosa, que en ocasiones por diferentes causas (que siempre deberá valorar un experto en lactancia) puede desembocar en problemas como una mastitis.
- Fleboedema o edema venoso: Es un edema de causa venosa que afecta al sistema linfático de los miembros inferiores. Sus principales causas son la insuficiencia valvular venosa crónica y tras una trombosis venosa profunda (síndrome post-trombótico).
- Edemas generalizados: hay otro tipo de edemas que no deben tratarse con drenaje linfático manual. Es el caso de los edemas causados por una insuficiencia cardíaca, renal, hepática…
Otras indicaciones del drenaje linfático manual:
El tratamiento de estos edemas dinámicos es diferente al tratamiento del linfedema. En estos casos no es necesario realizar sesiones diarias ni un vendaje multicapa. El número de sesiones y su periodicidad, dependerá de cada caso en particular, para lo que es necesario valorar el edema previamente. En algunos casos se puede pautar un vendaje compresivo con efecto circulatorio o unas medias de compresión, pero no un vendaje multicapa como en el caso del linfedema.
Ahora que ya sabes más sobre los tipos de edemas que existen, recuerda que en nuestro Centro Médico Premiummadrid, puedes beneficiarte de las propiedades del drenaje linfático manual para el tratamiento de cualquiera de las patologías indicadas en este blog (a excepción de los edemas generalizados). Además contamos con una piscina terapéutica donde podrás realizar ejercicios en el agua guiados por nuestros profesionales. Esto mejorará en gran medida el estado del edema gracias al efecto de la presión hidrostática del agua. Contamos también con una máquina de presoterapia que utilizamos para complementar el tratamiento de drenaje linfático manual siempre y cuando este indicado para el tratamiento de su patología. Pide cita para un drenaje linfático con nuestros especialistas, y para cualquier duda sobre la aplicación del drenaje linfático manual, no dudes en contactar con nosotros.